El blog de Jorge
¿Qué celebramos en Navidad?
En Argentina y en los países de la región la Navidad casi coincide con la llegada del verano, el fin del año, el comienzo del período vacacional, el cobro del aguinaldo y algunas cosas más. En los países del hemisferio norte coincide con el período invernal, la nieve,...
Escoger la mejor parte
Por Jorge Himitian LECTURA BÍBLICA. Lucas 10.38-42 (DHH): Jesús siguió su camino y llegó a una aldea, donde una mujer llamada Marta lo hospedó. Marta tenía una hermana llamada María, la cual se sentó a los pies de Jesús para escuchar lo que él decía. Pero...
La red no se rompió
Nuestro encuentro anual de la Apostolic Fellowship Internacional este año volvió a ser presencial. Nos reunimos en Lisboa, Portugal, el 18 y 19 de mayo. Uno de los oradores fue João Martins, pastor de una de las congregaciones más dinámicas de Lisboa, llamada La Casa...
El derramamiento del Espíritu Sobre toda carne
Desde el día de Pentecostés el Espíritu de Dios ha sido derramado sobre toda carne. Sobre todas las personas de todas las naciones. Sean judíos o gentiles. Musulmanes o budistas, paganos o cristianos, africanos o europeos.
El Espíritu ha sido derramado sobre todas las naciones, pueblos, razas, lenguas y tribus. Pero, en la mayoría de los lugares nada sucede. Aunque el Espíritu haya sido derramado sobre toda carne sigue reinando el caos, el desorden.
La tierra está “desordenada y vacía”. Hay desorden y vacío en los corazones, en las familias, en las naciones. Siguen reinando las tinieblas.
¿Por qué? ¿Qué está faltando? La Palabra.
En cuanto soltemos la palabra, y dónde la soltemos, por la acción conjunta del Espíritu y la Palabra, comienzan a ocurrir conversiones, nuevos nacimientos, milagros, liberaciones, sanidades, cambios de vida. Los hogares son transformados; los pueblos abandonan sus costumbres pecaminosas; y las naciones se van llenando del conocimiento de la gloria de Dios, como las aguas cubren el mar.
Dios reencaminará todo para el progreso del evangelio
El apóstol Pablo escribió las siguientes palabras a los filipenses desde la prisión. Era su primer encarcelamiento en Roma. Quiero que sepan, hermanos, que las cosas que me han sucedido han redundado más bien para el adelanto del evangelio. De esta manera, mis...
El misterio del sufrimiento
Estos son días y meses difíciles. Días de mucho dolor y sufrimientos. A todo nivel: en el mundo, en nuestro país, en la iglesia, en muchas familias. En estos días, como iglesia, estamos padeciendo y peleando la batalla de la fe, clamando por la salud de pastores y hermanos cercanos a nosotros. Sufrimos juntos, con ellos y sus familias. Nos sentimos más familia que nunca. ¡Cómo nos une el dolor! Cuando un miembro del cuerpo de Cristo sufre, todo el cuerpo sufre. Y unidos estamos clamando a Dios, golpeando insistentemente las puertas del cielo hasta que recibamos la respuesta.